domingo, 3 de junio de 2007

Decepción

Que difícil es olvidar lo que se sufre

Hay momentos en los que el dolor te ciega

Y no puedes escuchar las palabras de la razón

Porque tendemos a idealizar a las personas

Y al hacerlo también le abrimos las puertas a la decepción

En mi dolor me niego a escuchar palabras

Las justificaciones rebotan en mi mente

Y no quiero encontrar las explicaciones de nada

No, no juego a ser Juez ni verdugo

Simplemente algunas veces esperamos más de nuestros amigos

Y olvidamos que son humanos, con pensamientos

Y sentimientos diferentes a los nuestros

¿Que pasos seguir? ¿Olvidar la rabia?

¿Dejar a un lado la tristeza?

¿Se pueden borrar las decepciones?

¿O es simplemente hacer como que nada ha pasado?…

No, la idea no es dejar rencores tirados en el camino

Tampoco nuestros amigos dejan de ser amigos porque

No hayan actuado como queríamos o esperábamos

Hay que seguir andando, con los errores a cuesta

Apartar el cristal con el que vemos el mundo en blanco y negro

Y captar que una situación puede tener infinidad de colores

Comenzar a ver el punto de vista de los demás y tratar de entenderlo.

5 comentarios:

Soros dijo...

Creo que comprendo tu decepción. ¿Quién no las ha tenido? Pero, para ser un poco constructivo, te sugiero que en lugar de esperar cosas de los demás simplemente les aceptes. Si aceptamos a los demás, les vemos tal cual son, pero si esperamos cosas de ellos es porque les vemos como deseamos que sean y las cosas no funcionan así. He procurado sustituir en mi vida el verbo esperar por el verbo ACEPTAR. De hecho hasta mi blog se llama "Aceptando lo que venga", ja ja ja... Prueba tú, quizás sea una buena idea.
Con cariño siempre,

Violeta J. dijo...

Totalmente de acuerdo con Soros, sobre todo en teoría..porque ya sabes que tu y yo somos muy parecidas, y más de una decepción me he llevado de amistades, familiares y compañeros..
Pero es que hay veces que la decepción no es por ellos, sino por nosotros, sobre todo en mi caso, porque doy mucho o todo lo que hay en mi, y no recibo lo mismo a cambio.
Pero otras veces, es mi forma de ser: soy sensible, cabezona y algunas cosas no las entiendo como el resto de la gente. No por ello, ellos son malos amigos, sino, que mi personalidad choca con ellos.
Creo que debemos seguir el consejo de Soros. Se ve que tiene experiencia en eso, yo ahora mismo voy a ponerme a cambiar el chip, lo de esperar por aceptar!!!
Y seguiré siendo como soy en otros aspectos: como perdonar y olvidar que se me da bien, aunque me de aspecto de tonta, mi vida es mucho mas facil si no llevo la pesada carga del rencor.
Besos mi niña, y arriba ese animo!!

Alejandra dijo...

Es cierto Soros, tenemos que aceptar a las personas tal y como son, sin esperar que sean el reflejo de lo que sentimos, porque finalmente todos somos humanos, diferentes, y actuamos según lo que creemos estará bien.

Y definitivamente es bueno aceptar lo que venga, jaja, además de ser una buena idea, es un excelente consejo.

Muchos cariños amigo, que estés bien.

Alejandra dijo...

Nena que escribimos al mismo tiempo!!!! jajaja, deja de hacer esas cosas que de verdad voy a creer que somos raras, entré a hablar del comentario de Soros y cuando lo publiqué estaba el tuyo, osea que estábamos escribiendo al mismo tiempo. Aaaainnnssss que somos raras Violeta!!!.

Y bueno, sin rencores es mejor vivir, ya esa es una norma que pongo en práctica desde hace mucho, y me ha ido bien.

Muchos besos a los dos y gracias por opinar siempre en mi blog!!!

juliaduce@gmail.com dijo...

A veces los silencios son puentes que quieren superar la grietas en los afectos. Se es consciente de lo que se tiende y no del todo de lo que se arriesga. Tal vez se construyan desde la prepotencia de querer forzar situaciones, pero no dudes que siempre desde el cariño.
Un beso